¡Saludos, apasionados del arte y la historia! Hoy nos adentramos en una obra que une la literatura y el patrimonio escultórico de La Habana. Frente a la Iglesia del Santo Ángel Custodio, en la Plazuela del Ángel, se encuentra una estatua que rinde homenaje a uno de los personajes más icónicos de la literatura cubana: Cecilia Valdés. Esta obra no solo enriquece el paisaje urbano, sino que también nos sumerge en la trama de una de las novelas más importantes de la Cuba del siglo XIX.

El Escultor: Erig Rebull
Nacimiento: La Habana, 1966
Profesión: Diseñador y Escultor
Línea de tiempo y trayectoria profesional:
2011: Crea el complejo escultórico “Don Quijote”, una pieza de 4 metros de altura conformada por 7 letras gigantes que forman la palabra “Quijote”. Inicialmente ubicada en la fortaleza de San Carlos de La Cabaña, posteriormente fue trasladada a los jardines de la Casa del Alba Cultural en El Vedado, La Habana.
2013: Diseña “La Pluma de Martí”, una escultura monumental que simboliza la influencia literaria y periodística de José Martí. Esta obra fue instalada en el Memorial José Martí en La Habana.
2014: Inaugura la escultura de Cecilia Valdés, ubicada en la Plazuela del Ángel, frente al atrio de la Iglesia del Santo Ángel Custodio en La Habana Vieja. Esta fue su primera estatua realizada en bronce, inspirada en Cecilia Valdés y en su esposa Giselle Fundora, quien falleció mientras trabajaba en esta escultura.
2014: Crea la escultura “La Máquina de Escribir”, situada en la entrada de la Facultad de Comunicación de la Universidad de La Habana. Esta pieza representa la evolución de los medios de comunicación y rinde homenaje a las herramientas tradicionales del periodismo.












Estilo artístico:
Rebull se caracteriza por un estilo realista que busca inmortalizar figuras emblemáticas de la cultura cubana, dotándolas de una presencia tangible en el entorno urbano.
Proceso creativo:
Para la escultura de Cecilia Valdés, Rebull se inspiró en su primera modelo: su esposa Giselle Fundora, fallecida, a la edad de 32 años, buscando reflejar la belleza y elegancia del personaje literario. El proceso de creación abarcó dos años, durante los cuales colaboró con otros artistas y fundidores para dar vida a esta obra en bronce.
Origen del apellido “Rebull”:
El apellido “Rebull” tiene raíces catalanas. Uno de los escultores más reconocidos con este apellido es Joan Rebull i Torroja, nacido en Reus, España, en 1899. Aunque no hay evidencia directa de un parentesco entre Erig Rebull y Joan Rebull, es posible que compartan ancestros comunes, dado el origen geográfico del apellido.
La Escultura: Un Puente entre Ficción y Realidad
La escultura de Cecilia Valdés, inaugurada el 20 de diciembre de 2014, es fruto de la colaboración entre Erig Rebull y la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana.
Ubicada en la Plazuela del Ángel, frente al atrio de la Iglesia del Santo Ángel Custodio, el lugar es simbólico, ya que en sus alrededores se desarrollan escenas cruciales de la novela y la Cecilia quedó ubicada frente a la escultura de Cirilo Villaverde, inaugurada en 1946, y frente a la Iglesia del Santo Ángel Custodio, donde fueron bautizados figuras clave de la historia cubana como José Martí, Félix Varela y Alicia Alonso.
Características de la escultura:
Material: Bronce
Dimensiones: Tamaño natural, representando a una joven esbelta y elegante
Detalles: Cecilia sostiene un abanico en su mano derecha, su vestimenta refleja la moda colonial, con un vestido largo y peinado recogido.
Detalles de la creación y restauraciones:
La escultura desde sus inicios sufrió varios actos vandálicos, incluido el robo y quiebre de su abanico, que sostiene en su mano derecha. Debido a los daños y la amenaza de vehículos de carga que pasaban cerca de la plazuela, en 2023 fue restaurada y reubicada unos metros más adelante por el propio Erig Rebull, en dirección de la acera de la Iglesia del Ángel.
El Personaje de Cecilia Valdés
Cecilia Valdés o La Loma del Ángel no es solo la historia de un trágico amor, sino también un retrato crítico de la sociedad cubana de la primera mitad del siglo XIX, marcada por la esclavitud y las tensiones raciales. Es la protagonista de la novela homónima escrita por Cirilo Villaverde en el siglo XIX, una de las obras más representativas de la literatura cubana.
Sinopsis de la novela:
Ambientada en la Cuba colonial de 1830, la historia narra la vida de Cecilia Valdés, una joven mestiza, una mulata blanconaza resultado de la feliz mezcla entre negro africano y blanco español, hija de una mulata y un español, que desconoce sus verdaderos orígenes, con su belleza y gracia deslumbran a todos, además hija del rico Cándido Gamboa, español y poderoso personaje de La Habana colonial.
Su amor prohibido con Leonardo Gamboa, joven blanco de buena posición, está teñido de prejuicios raciales y sociales. Su romance incestuoso —pues ambos son hijos del mismo padre— está condenado desde el inicio a un trágico final.
Leonardo, incapaz de desafiar las normas de la alta sociedad en la que nació, abandona a Cecilia para casarse con Isabel Ilincheta. Sin embargo, el destino le tiene preparada una amarga sorpresa cuando José Dolores Pimienta, un mulato enamorado de Cecilia y alentado por ella, lo asesina.
Curiosidades sobre Cecilia Valdés:
Inspiración real: Se ha especulado que Villaverde se inspiró en personas reales para crear a Cecilia. Investigaciones recientes han descubierto una tumba en el Cementerio de Colón con la inscripción “Cecilia Valdés 1893”, lo que sugiere una posible conexión entre la ficción y la realidad.
Adaptaciones artísticas: Además de la novela, la historia de Cecilia Valdés ha sido llevada al cine y a la escena musical, destacando la zarzuela y la película de 1982 dirigida por Humberto Solás.
Símbolo cultural: Cecilia Valdés se ha convertido en un ícono de la cultura cubana, representando la mezcla de razas y culturas que caracteriza a la isla.
Detalles escultóricos y literarios
“Su semblanza evocaba a las vírgenes retratadas por los más célebres pintores.” – Cirilo Villaverde
El realismo en la escultura: Erig Rebull logró captar la esencia del personaje con una impresionante atención al detalle. Los límites entre las 18 partes soldadas minuciosamente para conformar la pieza definitiva pasan inadvertidos. La sutil expresión de tristeza en sus ojos y la gracia de su postura con el abanico en mano reflejan no solo la historia de Cecilia Valdés, sino también la inspiración en Giselle Fundora, cuya memoria quedó inmortalizada en esta obra.
Esta fue su primera estatua realizada en bronce, inspirada en Cecilia Valdés y en su esposa Giselle Fundora, quien falleció durante el proceso de creación. Esta carga emocional se refleja en la expresividad melancólica del rostro de la escultura.
La Iglesia ahora tiene ahora otra magia, la mulata Cecilia con su abanico en la mano derecha, vestido largo y peinado recogido, parece esperar a los turistas y habaneros que vendrán a visitarla y llevarse una Selfis en sus móviles.
Reflexión Contemporánea
💬 ¡Queremos escucharte!
💬 ¿Por qué Cecilia Valdés sigue siendo relevante hoy?
La novela de Villaverde más que una desdichada historia de amor, es una radiografía de la sociedad cubana del siglo XIX, marcada por el despotismo colonial y la esclavitud. Eusebio Leal afirmaba que “esta obra no podía faltar en La Habana”, destacando la trascendencia histórica de Cecilia Valdés.
🔵 ¿Qué representa hoy Cecilia Valdés?
🔵 ¿Crees que las obras literarias deberían tener más esculturas en espacios públicos?
🔵 ¿Cuál crees que sea el papel de la escultura en la preservación de la memoria cultural?
Cierre Inspirador
Dedicada a su esposa Giselle Fundora, la escultura de Cecilia Valdés es más que una representación artística; es el reflejo de un personaje literario que ha trascendido generaciones. Como símbolo de la cultura cubana, esta estatua nos recuerda que la historia y la literatura pueden cobrar vida en el espacio urbano, invitándonos a reflexionar sobre nuestro pasado y nuestra identidad.